miércoles, 10 de abril de 2013

Ponte la chaqueta, si no, te vas a enfermar – Las creencias en la crianza

Por Ana María Constaín


Eloísa esta obsesionada con la manga corta. Realmente obsesionada. Y con los vestidos, y las zapatillas sin medias. Parece que nació en el clima equivocado.
En la casa se ha vuelto un tema de dura negociación.
- Manga corta con manga larga debajo. En la casa y sólo hasta que se haga de noche.  Sólo en días soleados. Un ratico, hasta que mamá diga… -
Es agotador.
 Ahí voy, persiguiéndola con sacos, medias, y chaquetas.

-Eloísa, Ponte la chaqueta, si no, te vas a enfermar

Porque Eloísa estuvo en cuidados intensivos al mes y medio con una bronquiolitis que sembró en mi un miedo inmenso. Un miedo alimentado por muchas voces: Los niños que nacen con cesárea tienen problemas respiratorios, la bronquiolitis temprana deja el asma de secuela, hay un virus terrible en este momento, ¿es que como no enfermarse con estos cambios de clima?, ¿la vas a sacar con esta lluvia?...

Por supuesto, Eloísa sufre de tos, que ya es parte de nuestra vida. Y yo hago un gran esfuerzo por protegerla del gran enemigo: El frío.
Este esfuerzo se extendió a Matilde. Quién a pesar de mis proezas por mantenerla caliente, terminó al mes y medio también con bronquiolitis, oxigeno y reclusión en casa.
El miedo se volvió pánico y el enemigo un monstruo del que es imposible escapar. Se mete por las ventanas, se asoma en los días soleados, invade las noches, siempre me encuentra en los lugares menos pensados. Sobretodo en una ciudad como Bogotá.

Pero la obsesión de Eloísa no es cualquier cosa, y tampoco su perseverancia, y de tanto insistir me hizo pensar que tal vez esté pasando calor.
Y me he dado cuenta que el enemigo no es el frío sino mi miedo.
Se ha hecho obvio esto que ya sabía y que no podía ver: Las creencias determinan nuestra realidad.

Tal vez tengo que protegerme no del clima, sino de mis pensamientos. Enfrentar mis propios miedos y confiar en nuestra naturaleza saludable. Dejar que Eloísa esté en contacto con sus necesidades (Acaso si tiene frío no lo demostrará de alguna manera?)

Y especialmente dejar de decirle a mis hijas:

Ponte la chaqueta, si no, te vas a enfermar. 

2 comentarios:

  1. like!...fuera miedos y deja que ella se ponga la chaqueta cuando le de frío...ojalá Matilde ya esté mejor...besitos...

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  2. Si, creo que la frase final es la clave. Las palabras tienen poder y determinan lo que sucede. No hables más de que se van a enfermar, por que, efectivamente, terminaran enfermándose. Que buena reflexión. Un abrazo.

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